MODOS ECLESIÁSTICOS
Toda la teoría musical medieval hasta el siglo XI procede,
más o menos modificada, de la teoría musical griega. Estos modos son utilizados
en la Edad Media y son la base del canto gregoriano. Los modos eclesiásticos
también son llamados gregorianos (el nombre procede de San Gregorio Magno, Papa
entre los años 590-604, a quien la tradición medieval atribuye la organización
definitiva del canto eclesiástico).
En la Edad Media se aplicaron los nombres de los 8 modos
griegos a los 8 modos eclesiásticos, pero también se utilizaba la nomenclatura
en latín: protus, deuterus, tritus y tretardus (que significa 1º, 2º, 3º y 4º).
Existen 4 modos principales o auténticos que están formados en sentido ascendente por una 5ª justa más una 4ª justa. De ellos derivan otros 4 modos secundarios o plagales, formados por esa mima 5ª justa más una 4ª conjunta descendente.
A diferencia de los modos griegos, los eclesiásticos tienen sentido ascendente. La primera nota de cada modo auténtico y su correspondiente plagal se llama Finalis (final) y es la misma en los auténticos y en los plagales. La segunda nota en importancia se llama Repercusio (la dominante) o cuerda de recitación, es la nota en torno a la que se organiza la melodía. En los modos auténticos la Repercusio está una 5ª por encima de la Finalis, excepto cuando recae en la nota si, en cuyo caso pasa a do.
En los modos plagales la Repercusio está una 3ª por encima de
la Finalis, excepto en el Deuterus Plagal y en el Tetrardus Plagal, en los que
está una 4ª por encima.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario